Destinos con sabor

¿Tiene aceite de oliva virgen extra?

Pablo Amate

Viernes, 6 de octubre 2023, 00:14

Como siempre, cuento lo vivido. Me aconteció en el restaurante La Aguzadera, una de las dos paradas recomendadas entre Granada y Madrid, ya sea para ... un refrigerio, o darse un festín, sin Babette. Regresaba de Madrid y era hora de yantar. Esta casa de comidas, restaurada con estilo, tiene buenas propuestas cibáricas. Pero surgió la sorpresa; y grande. Todas las mesas, vestidas con mantel amplio de tela blanca, solo disponían de algo que chirriaba en el ambiente montero a la entrada de Sierra Morena. Solo tenían un plato pequeño con dosis de mantequilla francesa.

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Incómoda sorpresa

Chocaban esos paquetitos de grasa animal. Si hubiese sido en Santander o Francia, podía encajar. ¿Pero en Valdepeñas? Sin aspavientos, pedí a la camarera si disponían de AOVE. Al momento me ofreció tres tipos. Me decidí por el Duque de Bailén, al ser de la última cosecha. Solicité retiran la mantequilla de mi mesa sin vilipendio, sólo por coherencia con los platos que había pedido. Hacía tiempo que no me ponían mantequilla en restaurantes. Razoné rápido. El precio de los AOVE ha subido tanto, que es lujo dejar al libre albedrío una botellita por mesa.

Aceites infravalorados

No hemos sabido evaluar la importancia de un buen aceite de oliva andaluz y español. Al viajar a lejanos países y otros anglosajones, que no disfrutan sus virtudes, es cuando se aprecian los sabores atávicos en la gastronomía elaborada con aceite de oliva. Es por tanto que la Academia Óleo Gastronómica Internacional con sede en España, además de difundir sin lucro el AOVE, es consciente de los peligros que conlleva la situación, que viene de lejos. Falta conocimiento, amor propio y una educación primaria nutricional, al llamado 'green gold', oro verde. Olvidan que nuestra Bética (Andalucía) era la gran proveedora del Imperio y la República Romana, viajando nuestras ánforas olearias, de diferente forma y tamaño de las del vino.

Un pueblo come...

Una anécdota para reflejar el impacto que marcaban los hábitos alimentarios romanos de este ingrediente básico en toda la cibaria mediterránea. Se llegó a consumir por los latinos que vivían en Londinum (Londres) de la Britania romana. Siempre un pueblo viaja con sus recuerdos y sus sabores palatales. La Academia (AOGI) está atenta a las disparidades que surgen a diario: precio, calidad, fraudes y mezclas no autorizadas graves para la salud. Difuminando todo el trabajo formativo realizado hasta ahora por distintos entes, Universidad y Diputación de Jaén, cursos varios y la propia Academia Óleo Gastronómica Internacional que trabaja en el I Simposio sobre clima, regadío y aceites de oliva. Tengan cuidado con lo que consumen.

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