
¡Menuda lata de cordero... segureño!
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Ha sido una semana muy movida, con diferentes jornadas gastronómicas, de María de la O y Asador Curro. Entre medias, en Oleum pasaron otras cosas igual de sabrosasJesús Lens
Granada
Jueves, 15 de abril 2021, 23:57
Soy un facilón y esta semana lo he constatado en dos ocasiones diferentes. La primera, al salir de las fastuosa cita en María de la ... O, tras las jornadas gastronómicas con Cervezas Alhambra. Como ya se las conté en IDEAL el pasado viernes, no me voy a repetir, pero no me quedo con las ganas de recomendarles la cocina con criterio y personalidad de Chechu González una vez más: nunca falla. Eso es así.
Como estábamos en la Carretera de la Sierra, decidimos alargarnos al Asador Curro para hacernos con un par de botellas de su Vermú de Garaje Reserva Especial, una delicatesen made in Granada y reconocida nada menos que con 92 puntos en la prestigiosa Guía Peñín, auténtica Biblia en el gremio. Y es que el fin de semana nos gusta hacer un vermú en casa, como dicen en Catalunya.
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Al llegar nos encontramos con el anuncio de otras jornadas gastronómicas para el martes y miércoles pasados, con Royal Bliss como coprotagonista de la cocina del Asador. Y charla que te charla con Curro y con su socio, Bubi Morenodávila, cuya vitalidad, optimismo y entusiasmo son contagiosos; terminamos disfrutando de un fastuoso gin–tonic de la casa, elaborado con ingredientes granadinos 100%.
El sábado fuimos a pasear por San Antón para ver qué tal salía la iniciativa del Sotck Fuera, con tiendas y comercios mostrando en las aceras sus productos. Se respiraba un ambiente alegre y festivo, desenfadado y alegre. Colorido. ¡Con la falta que hace en estos tiempos tan grises!
Caminando, caminando, llegamos a Oleum. Podría decirles que fue casual que entráramos a saludar a ambos Gregorios, padre e hijo, pero lo cierto es que ya había visto en redes sociales su tapa de alcachofa con hummus, habas y papada de Joselito, preparada especialmente para Stock Fuera. Y se me hacía la boca agua.
Pedimos un Calvente tinto de la casa, una auténtica delicia, y mientras llegaba la alcachofa nos pusieron una tapa de arroz, picante y meloso. ¡Ay, esa alcachofa! De plena temporada y recién cosechada en Cájar, fue un bocado suculento, acompañada por las habas que cultiva el propio Gregorio en su huerta. El contraste con la grasa de la papada de Joselito y el toque de hummus terminaba de convertirla en una exquisitez.
Entonces, la pregunta: «¿Vais a quedaros a comer?». Teníamos previsto hacer un revuelto de espárragos en casa, después del vermú, pero ya les digo que soy facilón y que la cabra tira para el monte. Menos de un minuto después estábamos sentados con el mantel y los cubiertos desplegados frente a nosotros.
Hacía tiempo, mucho tiempo, que no probaba una ensaladilla rusa tan buena. Y miren que soy ensaladillero. Suave y ligera, casi etérea. ¡Pero qué sabor! Y entonces llegó ella. La única, la inigualable paletilla de cordero segureño que caracteriza a Oleum. Ya les he hablado otras veces de uno de los bocados más definitorios de la gastronomía granadina así que me limitaré a confirmar que, de vez en cuando, no hay nada mejor que ir a que te den la lata. De cordero, por supuesto.
Y cuando estábamos al borde del reventón, negando con la cabeza, en la mesa apareció una fuente de arroz con leche con el azúcar tan tostado que parecía caramelo. Una vez más se demostró que el ser humano tiene dos estómagos diferentes y que, por lleno que estés, siempre queda hueco para el postre.
Ni que decir tiene que, a partir de ese momento comenzamos un ayuno de dieciséis horas que, la verdad sea dicha, no nos costó ni un ápice cumplir. Porque en Oleum se come extraordinariamente bien. Y en cantidad, además. ¿Y las jornadas gastronómicos del Asador Curro? Se las cuento la semana que viene. Vaya por delante que fue un maridaje muy intenso con algunos de los platos de cabecera de la casa –la croqueta y el carpaccio de quisquilla– y otros que no había probado antes allí, como el bacalao con espinacas y la pluma ibérica. Pero, como les digo, se lo hablamos el próximo viernes.
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