Borrar
El refectorio

Costilla coreana, de 'Garbo'

Sergio González Hueso

Granada

Viernes, 4 de febrero 2022, 00:24

Lo más pecaminoso que se puede hacer hoy es meter los dedos en la pringue de una costilla bien cocinada y sacarle los huesos poco ... a poco. Para que salgan sin resistencia. Despacito. Ay. Como si se jugase a una Jenga a vida o muerte. Hace poco pude hacerlo y me sentí 'up in the air', como Georgina en el Bugatti. Porque no era una costilla más: había pasado media jornada española (cinco horas) rindiéndose al calor del horno.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

ideal Costilla coreana, de 'Garbo'

Costilla coreana, de 'Garbo'