
Secciones
Servicios
Destacamos
A ella le va el rollo underground, pero quedamos en el magnético Jardín Cervezas Alhambra del Palacio de Gomérez, donde nos conocimos hace ahora una semana, para hablar de bares, reales y de tebeo. Porque Clara Cábez, que firma 'Cols' su trabajo, cuenta la historia de una chica joven, roquera y noctábula en los cómics que dibuja y que escribe su hermana, Olivia. Clara vino a Granada para cuatro meses y se ha quedado tres años. Pero ahora vuelve a Madrid, donde espera encontrar más oportunidades profesionales en su trabajo como dibujante e ilustradora. Por ahí arrancamos esta charla.
–¿Qué le trajo a Granada?
–Su Facultad de Bellas Artes, la única en España que ofrecía la asignatura de cómic que tanto me interesaba. Efectivamente, vine para cuatro meses y me he quedado tres años. Es una ciudad maravillosa llena de gente muy creativa y que no deja de sorprenderte cada día.
–¿Se marcha con pena, pues?
–Mucha. Tanto que aún no lo he terminado de asimilar. Granada me ha dado el impulso que necesitaba para hacerme artista y creer en mi mí misma, convencerme de que valgo. He ganado recientemente un premio de ilustración que me va a permitir instalarme de nuevo en Madrid, mi ciudad, donde buscaré trabajo en el campo de la ilustración, en las agencias de publicidad y comunicación, etc.
–Y reencontrarse con su hermana Olivia, guionista de sus cómics...
–¡Sí! Nuestra forma de trabajo tiene mucho que ver con los bares, de hecho. Empezamos con un copazo para hablar de los personajes y de la historia y hablamos, hablamos, hablamos... (Risas).
–¿Quien es Cols?
–En parte, soy yo. Es un apodo familiar.Es práctico, corto y se pronuncia igual en todos los idiomas. Lo hice mío y con él bauticé al personaje, que está parcialmente inspirado en mí. Cols es una madrileña de veintipocos años que, como tantos otros jóvenes, tiene pocas aspiraciones y se siente perteneciente a una sociedad vacía. Lo único que le llena es la música y el panorama nocturno y roquero de la ciudad.
–Y ahí hacen aparición en escena los garitos...
–Bares reales de Madrid como el Nueva Visión, para fans de Los Ramones, en la calle Velarde de Malasaña. Su dueño, que una vez trató de matar a un amigo mío con un ladrillo, puede ser lo mismo muy agresivo que enormemente paternal con mi hermana y conmigo, como contamos en 'Una noche en el infierno'. Además, puede presumir de tener los baños más sucios de Madrid. (Risas).
–¿Y el fascinante EstupendaCafé Bar, de 'Sunday Morning'?
–También existe. Está inspirado en 'TwinPeaks', de David Lynch y se encuentra en la Plaza de la Luna. Ahí le pasa algo muy surrealista a Cols, como corresponde a un espacio inspirado en David Lynch.
–Ha trasladado ese universo a Granada, al cómic que acompaña al disco de El Niño Delta...
–¡Sí! Le gustó mi trabajo con Cols y a mí su música, así que hemos hecho un trabajo conjunto en el que el cómic se habla con las canciones del disco.
–Y aparece el Blus Bar...
–Es uno de mis garitos de referencia en Granada. He trabajado con Toni Anguiano, de Serpiente Negra, y después de los conciertos del Planta Baja nos íbamos allí con las bandas. He hecho trabajo de diseño en cartelería y, para conciertos como el de Komodor, pude experimentar y hacer cosas muy diferentes a las mías habituales. Ha sido toda una experiencia.
–¿Más experiencia en bares de Granada?
–En el Loop, que me encanta su concepto, la música que ponen, que vendan discos... Cuando necesité un trabajo, el dueño no dudó en contratarme y me ha servido mucho estar al otro lado de la barra para fortalecerme y aprender a poner límites. Aunque la clientela es muy de mi rollo, siempre hay personas maleducadas y si he tenido que echar a alguien, lo he hecho. También soy muy del Candela.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.