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Joaquín López Cruces, en la terraza de Ruta de Azafrán, recuerda los platos de sus viajes. Miranda García
Una Alhambra con | Joaquín López Cruces, dibujante

«Me gusta mezclarlo todo, en cocina y en la vida»

Poco dulcero, le gusta la fruta de verano. Recuerda con cariño los platos de su infancia, pero Joaquín López Cruces siempre mira hacia delante

Jesús Lens

Granada

Viernes, 14 de julio 2023, 00:41

Quedamos a la caída de la tarde en Ruta de Azafrán. Quiero que el dibujante Joaquín López Cruces se sienta como en casa y la terraza del restaurante en el Paseo de los Tristes ofrece unas vistas muy parecidas a las de su hogar, donde disfrutamos hace unas semanas del showcase de Sofía Comas. Bajo la atenta vigilancia de la Alhambra, Joaquín muestra algunos de sus fascinantes cuadernos de viajes, auténticas obras de arte.De ahí sale 'Bajo un rayito de sol', el libro de apuntes playeros que, publicado por Libros de Autoengaño en edición limitada, se presenta el martes 18 de julio en el Botánico, ese café que aúna cultura y gastronomía.

–¿Qué es 'Bajo un rayito de sol'?

–Es un libro de apuntes extraído de mis cuadernos de viajes. Como soy muy blanquito y no llevo bien el sol, cuando voy a la playa me coloco bajo la sombrilla y hago dibujos de lo que veo: los cuerpos tumbados al sol, que son muy expresivos. Gente que lee o se baña y se muestra despreocupada; los paisajes de playas del Cabo de Gata, Salobreña, Caños de Meca, Almuñécar o Motril, trabajadores que pasan por las playas, como los vendedores de mojitos...

–¿Cómo surgió la idea?

–Como con la pandemia no se podía viajar, Lucía González me planteó hacer un libro diferente al de otros años, pero igualmente viajero. Y de ahí salió la idea de recopilar esos dibujos de playas y gente. Además, como tengo horror vacui, he llenado los espacios en blanco con letras de canciones que hablan del sol y el calor.

–¿Enamorado del Cabo de Gata?

–Absolutamente. Recomiendo especialmente los alojamientos rurales del Molino de Fernán Pérez. Está a unos ocho kilómetros de la playa de las Negras y es un lugar muy tranquilo al que me voy siempre que necesito recargar pilas. Su horizonte me da paz espiritual. Maise (Maria José) había tenido una jaima en Los Escullos durante muchos años y se quedó el molino de sus padres, acondicionándolo para el turismo rural. Para ayudarla, hicimos un libro en el que colaboramos Javier Olivares y Eva Vázquez en el que se cuenta su historia. Te recomiendo ir a La Enriqueta, en Huebro, por encima de Níjar. Ponen las mejores patatas fritas del mundo.

–¿Cómo nació su pasión por los cuadernos de viajes?

–El primero lo hice en Palencia, allá por el año 86. Dibujé mapas, itinerarios, esbozos... y me aficioné.Es una forma de fijar recuerdos y de dejar testimonio gráfico del viaje. El siguiente lo hice enMarruecos... ¡y lo perdí! Creo que cambiando dinero en un banco. Y este de Vietnam estuvo a punto de acabar en el agua.

–¿Y su publicación?

–Casi por casualidad. Estaba en unSalón del Cómic de Barcelona con Manel Fontdevila, Manolo Vergara y José Luis Ágreda; vieron uno de los cuadernos y lo tuvieron claro: «Esto hay que publicarlo». Me arrastraron a ver al editor Paco Camarasa y fue igualmente tajante: «Lo quiero». Como no me lo creía, tardé dos años en tener listo 'Por el camino yo me entretengo'. Entonces apenas había de estos libros en España, quizá alguno de Miguel Gallardo. En Francia sí eran habituales.

–¿Qué le dan, artísticamente?

–Libertad y frescura. En mi trabajo en la agencia Manigua me debo a los clientes y el trabajo es más formal. Aquí no. Allí hago más diseño y mucho trabajo técnico, que también me gustan los ordenadores, por lo que dibujo menos. Así me desquito.

–¿Cómo trabajó con Juan Pinilla en el libro sobre Saramago?

–Le conocía de antes, que colaboré en un disco suyo, 'Las voces que no callaron'. La idea era trufar su narración con varios dibujos que mostraran a Saramago en diferentes momentos de su vida, incluyendo la niñez. Pero lo más importante es que el libro provoca ganas de leer todo lo que escribió el Nobel portugués. Ya tenía experiencia con otros libros sobre Miguel Hernández, Pasionaria o Marcos Ana en la editorial Atrapasueños.

–Tengo pendiente recorrer con Pinilla sus bares del Zaidín...

–¡Me apunto! ¡Día y hora!

–¿Es usted cocinicas, a todo esto?

–Cuando tengo tiempo. Eso sí, mis parejas me han criticado que mezclo demasiados ingredientes. Pero es que así me gusta la vida: mezclándolo todo, amigos incluidos,

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