Michelangelo, el restaurante del futuro que triunfa en Granada

Ser una nueva cadena de franquicias dedicada a la restauración del futuro es el objetivo con el que, en 2019, nació Michelangelo, un restaurante de pasta y hamburguesas inspirado en el concepto de comida rápida, pero cuya propuesta es muy diferente. Ubicado en la Gran Vía, en el mismo lugar donde antiguamente se encontraba el Café Americano, ofrece «comida de alta calidad con un servicio ágil, con un precio más bajo que la media de los restaurantes tradicionales, pero con una calidad y cantidad muy superior», explica Daniele, cabeza del restaurante junto a su socio Stefano.

Ambos residían en la Casa del Americano cuando decidieron montar su negocio de comida italiana y americana. Los inicios no fueron fáciles. Para tener éxito, «hay que estudiar». Se cocinan grandes cantidades de comida cada día, hay que mantener la calidad de los alimentos y elegir a los proveedores adecuados, así como todos los procedimientos de seguridad alimentaria. Afortunadamente, la amplia experiencia de Daniele en McDonald's, donde durante diez años trabajó en el departamento internacional y de desarrollo, unida a los conocimientos adquiridos por Stefano en grandes hoteles de Venecia como chef y pastelero, son «la base del éxito de Michelangelo».

Su éxito tiene sentido. La sociedad tiene cada vez más prisa y toda empresa debe reducir sus costes de funcionamiento y su impacto medioambiental y estar preparada para nuevos retos. Por eso, Michelangelo no es un restaurante de comida rápida, sino «un restaurante del futuro». Existen opciones similares en ciudades como Nueva York, Roma, París, Londres y Dubái, en las que la comida se pide en la caja (como en un restaurante de comida rápida), pero luego el personal sirve el pedido en la mesa, con una vajilla y unos vasos diferentes. Es «una experiencia nueva y rápida», similar a los restaurantes temáticos de parques de atracciones como Disneyland.

Michelangelo compra materias primas a productores locales y, con recetas cuidadosamente diseñadas para garantizar un estándar multi-local, produce la mayoría de los productos que vende en el propio restaurante, desde carnes a salsas, postres a pasta... «Es la primera cadena de restaurantes rápidos del mundo con una producción totalmente artesanal -subraya Daniele-. Además, nuestro carnicero de confianza prepara la carne siguiendo nuestras instrucciones y los cortes de carne especificados por nosotros, que luego se procesan in situ». Su oferta es italo-americana, por lo que algunos productos sí se importan de Italia y de Estados Unidos, pero la carne y las verduras son 100% de KM. 0.

El secreto está en la salsa

Su punto fuerte es la salsa Michelangelo, inventada por ellos y que ha lanzado al estrellato a dos de sus hamburguesas, la Wild Royal y la Wild Chicken. La lasaña tradicional y la lasaña al pesto también tienen una gran demanda, pero los reyes son los espaguetis carbonara con bacon guanciale de Roma, queso parmesano italiano y huevos frescos. También rinden homenaje a Granada, con una hamburguesa de secreto, popular desde la apertura del local, que siempre se ha caracterizado por la hospitalidad de su personal.

«Nuestra manera de ser italianos, de ser amigos de todos, de tratar a todo el mundo con amabilidad, respeto y mucha alegría... Nuestros clientes son huéspedes a los que tenemos que dar las gracias, por ellos tenemos un sueldo a final de mes», apunta Daniele. Su intención es que se sientan como en casa, entre amigos. Además, «cuando la cuenta no es demasiado cara y la comida llega muy generosa y de calidad, pues... Las críticas en Google hablan por sí solas». Pero, como se dice en Italia, «hay que probar para creer», por lo que Daniele y Stefano aconsejan a todos los que aún no conocen la propuesta de Michelangelo, que prueben «la experiencia, rápida y saludable, del restaurante del futuro».