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El grafiti sirve como testigo mudo de la conversación sobre alimentación vegetariana en Hicuri. A. AGUILAR
«Los museos cuidan la etnografía culinaria de los pueblos»
Una Alhambra con | Soledad Gómez, museóloga experta en tecnología

«Los museos cuidan la etnografía culinaria de los pueblos»

Vegetariana desde los 12 años de edad, Soledad Gómez Vílchez ha notado una gran evolución en Granada respecto a la gastronomía 'verde', natural y saludable

Jesús Lens

Granada

Viernes, 17 de diciembre 2021, 00:22

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Museóloga especializada en nuevas tecnologías, Soledad Gómez tenía claro que, aunque en muchos bares de Granada ya ponen tapas 'verdes', esta charla tenía que desarrollarse en Hicuri, uno de los restaurantes vegetarianos más reconocidos de Granada. Nos citamos allí y ocupamos una mesa situada junto a uno de los espectaculares grafiti que decoran el interior del local, dándole un ambiente luminoso y colorido.

–Entiendo perfectamente por qué aquí, que usted es licenciada en Bellas Artes...

–Me gusta Hicuri por su comida, por supuesto, que es estupenda, pero también me encanta su decoración artística. Es uno de mis restaurantes de referencia.

–¿Qué otros restaurantes vegetarianos frecuenta?

–Paprika, Wild Foods y Raíces, que está muy cerca de mi casa.

–¿Desde cuándo es vegetariana?

–Desde los 12 años. De niña me gustaban mucho los animales y no entendía eso de comérmelos. Empecé renunciando a la carne que tenía forma y apariencia de animal y un año después, a todo tipo de carne y pescado.

–¿Qué le pareció a sus padres?

–Lo respetaron. Quizá pensaron que sería un volunto y que se me pasaría con el tiempo, pero aquí seguimos. (Risas). Al principio perdí peso, que en los años 90 no había tanto acceso a la información como ahora, pero mi madre es una cocinera estupenda y rápidamente se adaptó y preparó recetas sabrosas y nutritivas.

–¿Es usted cocinitas?

–¡Mucho! Aunque me siguen encantando los táper que me trae mi madre desde Montefrío. (Risas). Me gustan mucho las legumbres y hacer pruebas con la comida, mezclar ingredientes y experimentar. El arroz y las lentejas, por ejemplo, son una proteína completa. A partir de ahí se pueden hacer mil y una combinaciones con especias u otras legumbres. No todo tiene que ser seitán o tofu.La dieta mediterránea es muy amplia y variada y el sabor natural y auténtico de los productos es una gozada.

–¿Qué destacaría de la gastronomía de Montefrío?

–Sus quesos, claro, que han ganado muchos premios y están buenísimos. Los espárragos, los aceites de oliva y su repostería de herencia árabe. Los 'cuajados', con almendra triturada y fruta de temporada, son espectaculares. Como los dulces de Semana Santa. Hay postres con mucha historia detrás.

–¿Consume mucho producto de temporada?

–Todo el que puedo. Creo en la sostenibilidad y ahí entra el producto de mercado y de cercanía, el km. 0. Y también la compra de productos a granel: sin envases de plástico puedes llevarte la cantidad justa de todo tipo de legumbres para hacer diferentes combinaciones y que no se echen a perder.

–¿Y la agricultura ecológica?

–También. Va muy de la mano del producto de cercanía y la compra en las tiendas de barrio y en los mercados. Y no es un producto tan caro como muchas veces se quiere hacer ver. Me gusta comer sano y comer rico.

–¿Cómo ha evolucionado la Granada gastronómica vegetariana?

–Estupendamente. No solo por la apertura de más restaurantes especializados, sino también porque la inmensa mayoría de establecimientos tiene mucho cuidado y respeto. A veces hay que preguntar, que en los revueltos se cuelan las gambas casi sin querer, pero muy bien. Sobre todo, los restaurantes que trabajan la cocina de mercado. Ahora están las setas en su punto, por ejemplo. Con los sandwiches vegetales también hay que tener cuidado, que el jamón de york y el atún, para algunos, son plantas. (Risas). Y cada vez hay más variedad de tapas vegetales en los bares, que ha sido lo más difícil.

–¿Cómo se relacionan la museografía y la gastronomía?

–La etnografía de los pueblos está vinculada a la comida: utensilios, vajillas, productos... El museo de la Alhambra tiene muchos de estos objetos. ¡Y los bodegones!

–¿Y las nuevas tecnologías, otra de sus especialidades?

–Las redes sociales son un ejemplo, con influencers gastronómicos muy importantes. Yo tuve una cuenta de Instagram con más de 60.000 seguidores. Hacía recetas vegetarianas, pero lo dejé por falta de tiempo, que es un trabajazo... y porque mi familia se hartó de comerse los platos fríos para que yo les hiciera fotos. (Risas).

MENÚ DEGUSTACIÓN

  • Un ingrediente Las legumbres

  • Un sitio para celebrar Rosario Varela

  • Una tapa para abrir boca Pincho de tortilla de patatas

  • Una cocina internacional La japonesa

  • Dulce favorito Cuajado de Montefrío

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