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Jueves, 15 de agosto 2024, 23:42
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Quedamos en La Cueva de 1900 más reciente, la de Gran Parque Granada, un local extraordinario donde seguir disfrutando de la propuesta gastronómica de la popular empresa granadina, de sus chacinas imbatibles a sus sabrosas hamburguesas, como fue el caso. Llegué algo tarde a la cita con Enrique Montiel de Arnáiz y me lo encontré haciendo tiempo justo enfrente, tomándose un helado en Marconata, encantadísimo por el descubrimiento. Acaba de publicar su novela más reciente, 'Melodía de sangre', con una impactante portada pulp.
–¿Qué le trae a Granada?
–¡Un juicio! A ver qué tal nos sale. Llevaba tiempo sin venir a Granada, pero me voy mañana mismo. Tengo que volver con más tiempo para disfrutarla bien.
–Es abogado y autor de novela policíaca. ¿Aparece bien reflejado el procedimiento judicial español en novelas y películas?
–Es uno de mis empeños al escribir: plasmar el proceso real español en mis novelas. Es muy habitual encontrarse las típicas 'milongas' sacadas de las películas norteamericanas. Me da rabia que producciones audiovisuales con presupuestos millonarios no inviertan en una auditoría de corrección de procedimientos, contratando a un abogado.Series como 'Hierro' o 'Antidisturbios' están muy bien en ese sentido.
–'Melodía de sangre' transcurre en La Baraka, una localidad imaginaria del sur de España...
–He creado un universo literario propio basándome en mi entorno. Por ejemplo, uno de mis protagonistas, el abogado penalista Jeff Hortas, se lleva a una clienta a la que acaba de sacar de la cárcel a comer buena carne. Me inspiré en un local llamadoEl Santuario, de Chiclana de la Frontera, cuya fundadora era finlandesa. Además de vodka de su tierra, tienen unos solomillos de reno finlandés que son mantequilla. ¡Solomillo vikingo!
–¿Qué sitios nos recomienda de esa parte de Cádiz?
–La Venta de Vargas, por supuesto. Un clásico imprescindible, con su berza gitana. Por cierto que tengo su famosa receta de la tortillita de camarones, aunque no puedo desvelar cómo ni por qué. (Risas). Usan una gaseosa concreta y una harina especial, además de un producto de calidad excepcional. El Campero es otro clásico, como la Peña de Pescadores de Barbarte. Para carnes, Asador La Castillería de Vejer. Y El Jardín del Califa. No se te ocurra no reservar en cualquier de ellos, eso sí. ¡Y en Jerez acaban de abrir un sitio muy interesante: Taberna Capricho Diario!
–¿Y qué tal la influencia de Ángel León?
–Extraordinaria. Tanto por su Aponiente, con tres estrellas Michelin, como por La Taberna del Chef del Mar y Alevante, en Chiclana. Además, algunos de sus discípulos siguen su estela y abren sitios nuevos en el entorno. Un lujo.
–En su novela 'Melodía de sangre' hay mucha metaliteratura, además de humor y sexo...
–El punto de partida vino al compartir presentación con otro autor en un garito que conoces de ElPuerto de Santa María, el Milwaukee, que también es un potente centro cultural. ¿Qué pasaría si, al salir de prisión, una asesina psicópata sexual, conocida como Partefrenillos, se encontrara con que su abogado ha escrito una novela basada en sus sangrientos crímenes y estuviera a punto de presentarla al público? Y hasta ahí puedo contar. (Risas).
–¿Introduce en sus tramas cosas que conoce como abogado penalista que es?
–¡Claro! Pero nunca escribo de mis casos y siempre lo hago al estilo de 'Fargo', que juega al despiste con lo de «ésta es una historia real. Los acontecimientos descritos en esta película ocurrieron en Minnesota en 1987. A petición de los supervivientes, los nombres han sido cambiados. Por respeto a los muertos, el resto se ha relatado tal como ocurrió».
–¿Le interesa el True Crime?
–Antes más. Ahora hay demasiado. Me gusta el abogado penalista y novelista alemán Ferdinand von Schirach; Emmanuel Carrèrre o David Grann. Españoles: Elena Merino. O lo que hizo SantiagoDíaz en 'Las otras niñas', sobre el tema de las niñas de Alcàsser, con quien tuve ocasión de hablar sobre la cuestión de la prescripción de los delitos.
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