El verde salvaje de Wild Food en Granada

Parecen huevos revueltos, pero no lo son. Es 'tofu scrambled' y está buenísimo. El café lleva leche, pero no de vaca. Es leche vegetal. Y está igualmente exquisito. Y no les digo nada del 'Dracarys', un espectacular huevo de chocolate con núcleo de bizcocho de avellana, crujiente de pailleté y cremoso de chocolate-kinder. Acompañado de helado, y coronado con la salsa de toffee que lo funde todo. Es todo un espectáculo y dan ganas de grabar con el móvil ese proceso de fundido.

Estamos en Wild Food, un restaurante 'Plant Based' en el que la filosofía del 'verde que te quiero verde' está impresa en su ADN y resulta perceptible desde que cruzas la puerta del Hotel Colón, en plena plaza de Isabel la Católica, y te sientas a una de sus mesas junto a esos enormes ventanales que le dan su especial idiosincrasia a un restaurante único y especial en Granada.

Y es que restaurantes vegetarianos y veganos hay muchos en nuestra ciudad, pero tan estratégicamente situado, tan bello y con un ambiente tan especial, moderno y a la vez cálido y acogedor, es difícil de encontrar. Esa decoración, esa luz, esa música…

Y la comida, claro. Que hablamos de un restaurante y, por encima del continente, está el contenido. La carta, o sea. Nos sentamos con la fundadora y dueña de Wild Food, Rocío Hidalgo, para conocer un poco mejor la filosofía de su restaurante, que es su propia filosofía. «Vengo de familia humilde y siempre he sido muy independiente. Empecé a la trabajar a los 16 años, con permiso, como extra para bodas, bautizos y comuniones. Era mi manera de ganar dinero y tener mis propios ahorros», nos cuenta.

«Compatibilizaba los estudios con el trabajo y, a mis 20 años, la responsable de la empresa se jubiló y me quedé al frente de un grupo de 120 personas que hacía eventos por toda la Costa Tropical», explica Rocío, a la que le encantan la gestión de equipos, el marketing y todo lo relacionado con el comercio. «Creo que tengo dotes para liderar equipos y trabajar con gente. La clave es trabajar duro tú también y dar ejemplo. De esa forma, el equipo responde».

Tras independizarse y montar su propia empresa, trabajó en el sector de los eventos hasta 2008, cuando llegó la crisis. Tras traspasar la empresa a una compañera, Rocío se centró en la gestión de hoteles y restauración a partir de 2010 y poco a poco fue madurando la idea que terminaría desembocando en Wild Food. Y llegó la pandemia, que tanto daño hizo. «Peleé para quedarme con Wild Food. Era mi idea y lo monté para otros, pero cuando llegó 2020 y todo se cerró, luché para quedarme con él y lo conseguí». Lleva dos años siendo la única propietaria y cuenta con un equipo entregado que es como una familia.

¿Desde cuándo es vegana Rocío? «Siempre he estado conectada a la naturaleza y a los animales, sintiendo una empatía muy grande y fuera de lo común. No me sentía cómoda comiendo carne, no era coherente con mis valores. Después llegaron las lecturas, empecé a estudiar y tomé la decisión. Fue algo definitivo, súbito, en absoluto progresivo. Si tomo una decisión es a muerte. Hubo un libro clave que siempre recomiendo: 'Por qué amamos a los perros, nos comemos a los cerdos y nos vestimos con las vacas'. Es escueto, transparente y directo. Tenemos la información y tenemos alternativas. No hay excusas. Al no comer carne no contribuyo al maltrato animal y ayudo a que el Planeta vaya mejor. Me gustan los viajes de naturaleza, la vida saludable y hacer deporte. Además, disfruto trabajando por lo que Wild Food es un proyecto que se identifica plenamente conmigo».

¿Cómo se define la propuesta gastronómica del restaurante, ese 'Plant Based'? «Comida basada en plantas. Creativa, sabrosa, rica y para que disfrute comiendo todo el mundo. Tenemos el convencimiento de que no tener productos animales no es una limitación, sino que nos genera oportunidades», explica Rocío Hidalgo. «Es un fenómeno que va en aumento no por moda, sino porque cada vez hay más información y alternativas. Las nuevas generaciones están más abiertas a salirnos del carril que nos inculcan desde pequeños».

No es de extrañar, pues, que la propuesta de Wild Food fuera tan bien aceptada desde el principio, en Granada. «Tenemos 25 platos en carta que gustarán a todo el mundo. Una propuesta muy internacional para picar y disfrutar que va mucho más allá de las ensaladas, por supuesto. Incluye hamburguesas, arroz meloso, croquetas, pizza, pad thai, etc. Todo sin gluten además. ¡Y los postres! Tartas de chocolate, zanahoria o queso y el Banana bread que combina plátano con pepitas de chocolate que se derriten en la boca! Repostería vegana sin gluten ni trazas de posible contaminación cruzada».

¿Y qué clase de clientela va a Wild Food? «De todo tipo», nos dice Rocío. «Desde turistas y viajeros a clientela local. Me encanta sobre todo cuando viene gente joven con sus padres y éstos se van encantados con la experiencia». También es importante resaltar la originalidad en las bebidas, con refrescos caseros y vinos especiales, como uno que ayuda a cuidar los corales y contribuye a la protección del medio ambiente. Con horario ininterrumpido de 9 a 23 horas entre semana y a 00 horas en fines de semana, la cocina non stop de Wild Food es una opción original, diferente y siempre exquisita para desayunar, comer o cenar en el centro de Granada.

Planes de expansión

Rocío Hidalgo es inquieta por naturaleza y no deja de pensar, tramar y planear. Quiere distribuir su repostería vegana en el sector HORECA y ampliar su servicio de catering. «Cada vez más empresas y particulares están concienciados en la importancia de ofrecer una alternativa saludable y una comida más sostenible que contribuya al bienestar del Planeta», señala. Además, está trabajando en el diseño de carnes vegetales basadas en el guisante amarillo, de alto poder proteico. «Nutricionalmente es increíble, sin alérgenos y especialmente indicado para deportistas».

Comida vegetal para distribuir a través de tiendas y comercios ecológicos igualmente concienciados. Wild Food es un presente delicioso que no deja de mirar al futuro y de apostar por la investigación, el desarrollo y la innovación en el campo de la alimentación sostenible.

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