ZORROVIEJO: Innovación gastronómica basada en el maridaje

Para Granada Gourmet, en Zorroviejo han preparado un menú con encanto, especial y diferente, en el que conviven platos habituales de su extensa carta con creaciones preparadas ex profeso para la ocasión por el equipo de cocina comandado por Alejandro Peñas. Platos que, dada su buena acogida por parte de los comensales que ya los han disfrutado, pueden pasar a formar parte de la carta habitual de un local que apuesta por una cocina moderna basada en un producto de primera calidad.

Otra característica importante de la propuesta de Zorroviejo: un menú maridaje en el que los vinos, seleccionados por el especialista Carlos Jiménez, desempeñan un papel tan importante como los platos a los que acompañan.

El aperitivo de bienvenida, creación especial del cocinero y que irá maridado con una cerveza Victoria, es una sorpresa que busca llamar la atención del comensal. ¡Y vaya si lo consigue!

También sorprenden los primeros entrantes, que son nuevos y no habían aparecido en la carta de Zorroviejo hasta ahora. Se trata de diferentes modalidades de croquetas semilíquidas: de hinojo y morcilla con compota de manzana y de jamón ibérico y cebolla. Estarán maridadas con vino Vivanco rosado D.O. Rioja y la novedad es que la compota de manzana y la cebolla serán añadidas, al gusto, por parte del cliente, al que se involucra en el remate del plato.

El siguiente bocado sí es uno de los clásicos de la casa, muy representativo de su carta: Ensaladilla de gambas con atún rojo y huevo frito. Continúa el menú con un Risotto de puntalette con pato y katshuboshi. Es un plato muy sorprendente porque el puntalette es una pasta que imita al arroz.

Estos platos vienen maridados con el vino Entremares Dry D.O. Tierra de Extremadura. Se trata, también, de hacer algo diferente y original con los vinos, de sorprender al comensal con denominaciones de origen diferentes y posibilitar que prueben sabores diferentes a los habituales.

Llega el turno de los pescados: Ceviche de corvina con salsa de pimiento amarillo al estilo ají, uno los platos habituales en la carta de Zorroviejo. Una receta con sabor transatlántico que conecta con los sabores de Perú, una de las mecas para los gastronómadas más curiosos e intrépidos.

Continúa con una Trenza de merluza con papada ibérica, acompañada de parmentier violeta y ali olí de tinta de calamar, que sí es una nueva creación del equipo de Alejandro Peñas. Un mar y montaña que apunta alto y promete emociones intensas en el paladar.

Estos dos pescados estarán maridados con Fulget D.O. Albariño, uno de los mejores vinos de una denominación de origen con tanta fuerza como predicamento a la hora de acompañar a los mejores pescados.

El menú con encanto de Zorroviejo se completa con dos carnes. La primera, otro de los clásicos del restaurante: Steak tartar con papadums. La Presa ibérica con crema de boniatos y chutney de higos, aunque está en la carta, lo hace de otra forma, por lo que esta elaboración también se puede entender como novedosa, diferente y original.

Las carnes vienen maridadas con Valdehermoso 9 meses D.O. Ribera del Duero, un vino ecológico de mucha calidad.

Como postre, Zorroviejo plantea un sorprendente Tataki de sandía con sopa de chocolate blanco y yogur. Aunque todavía no está en carta, ya ha sido probado por algunos de los clientes de confianza de la casa y funciona muy bien. Además, visualmente llama poderosamente la atención, otro de los aspectos que hay que cuidar en el mundo de la restauración, sobre todo, desde la explosión de las redes sociales y los amantes de la cocina que disfrutan, también compartiendo las fotografías de sus platos favoritos.

Un postre que viene maridado con Buche Rosado, un muy buen cava de Extremadura que permite, una vez más, probar algo diferente y original.

Una propuesta, la de Zorroviejo, que está gustando a los clientes que ya conocían el restaurante anteriormente y que, a los nuevos que lo visitan por primera vez, les resulta un gran descubrimiento.