Pureza 90, el restaurante 'todoterreno' de la Romanilla

«Lo cierto es que pusimos varios nombres encima de la mesa y elegimos el que nos resultó más adecuado para la plaza. 90 también es por mi año de nacimiento», cuenta José, que con el paso del tiempo ha ido reforzando la oferta gastronómica de Pureza 90. A día de hoy, el restaurante está abierto durante todo el día, un factor clave para muchos locales y turistas que buscan reponer fuerzas y refrescarse.

Pureza 90 ofrece un asequible menú del día, algo cada vez más demandado en la ciudad nazarí. También cuenta con una amplia carta de desayunos, en la que el cliente puede encontrar desde las típicas tostadas simples hasta tostadas con aguacate, con huevos y bacon y con huevos revueltos. Además, tienen unos exquisitos croissants y preparan el famoso desayuno inglés, que «eso sí es para guiris, pero también lo piden los locales».

En cuanto a los platos principales de Pureza 90, las opciones son todas de primera calidad. El pulpo, por ejemplo, es una de sus especialidades. El chef lo prepara con un parmentier de trufa y se cocina a la plancha. Por otro lado, triunfan los huevos rotos, que se pueden disfrutar tanto con jamón ibérico como con secreto o con gulas y gambas -todos ellos acompañados también de trufa-.

Turístico y asequible

Pureza 90 abre desde las 09:30 horas hasta las 00:00. No cierra la cocina y, como todo buen bar granadino, también pone tapas. Además, para los más pequeños o para aquellos que busquen una apuesta segura, el restaurante pone a su disposición un abanico de pizzas, «un clásico que nunca falla». «Somos un poco todoterreno. Tenemos de todo y nos adaptamos al cliente. Intentamos agradar a todo el mundo», señala José, consciente de que el local está «condicionado» por su ubicación.

La plaza de la Romanilla es una de las más turísticas de Granada. Por delante de su puerta, de hecho, pasa cada día el tren turístico y, por si fuera poco, la catedral está justo enfrente. «Parece que tenemos que dar servicio a los guiris, pero nuestra carta no es guiri. Tenemos cliente internacional y nacional, pero también viene mucho granadino», asegura el gerente.

La hostelería vive un momento complicado en los tiempos que corren. Los precios se han disparado y la gente ha optado por ajustarse el bolsillo. Por eso, Pureza 90 no quiere caracterizarse por ser un restaurante «caro». Su objetivo es que el cliente «no se deje mucho dinero» y que el local «siga creciendo». Lo importante es que se vayan «con buen sabor de boca».