Jueves, 14 de febrero 2019, 19:21
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Tras tres años de colaboración entre la escuela de hostelería Hurtado de Mendoza y la Alhambra, los alumnos de último curso de cocina y sala, junto a sus profesores, han elaborado un menú como colofón de las investigaciones y acercamiento a la época nazarí. Un almuerzo en el que todo estuvo medido milimétricamente para no albergar ningún fallo. Desde la vajilla, elaborada para la ocasión por ceramistas granadinas, hasta la recreación del atuendo del personal de sala, se tuvo en cuenta para recrear fielmente una época de esplendor como pocas.
Tatiana Merino.jpg)
.jpg)
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
- 1 Un incendio en los árboles de un convento de Granada obliga a intervenir a los bomberos
-
2
- 3 Desmantelan una banda de ladrones violentos con más de 150 robos que actuaba en Granada
-
4
- 5 Tormentas y calor extremo: Andalucía y otras nueve comunidades, en alerta para hoy
- 6 Un hotel en Granada para vivir un fin de semana como un troglodita
- 7 Cuál es el importe del Impuesto de Sucesiones y quién está exento en Andalucía
- 8 El invento de Amazon para despistar a los ladrones en verano por 20 euros
-
9
- 10 El truco de una médico para evitar los gases después de comer: «Hay formas fáciles»
-
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.